domingo, 1 de septiembre de 2013

Osculum


  
La mayoría de las historias románticas tienen sus inicios en un día de primavera, pues bien, esta no iba a ser menos.

   Su tez brillaba bajo la tenue luz de los últimos rayos del sol antes del ocaso. Allí lucia de espaldas, dejando visualizar su hermosa figura perfectamente contorneada por los tejanos que la cubrían. La brisa del atardecer animaba a su blusa a blandirse contra dirección.

   Poco tiempo después, el mismo brillo en su rostro iluminaba la habitación inutilizando la luz emitida por dos fluorescentes. Mis manos estaban apoyadas en su cintura y las suyas se unían entre si detrás de la cabeza apoyando sus brazos  sobre mis hombros. Aún recuerdo el lento y delicado momento en el que una de mis manos se separó de su cuerpo para apartar el cabello que cubría cara y cuello como si de hebras de fina porcelana se trataran… delicadeza!.

   Ninguna ciencia neótica podría resolver el enigmático movimiento deseoso por ser abrazado, cuya consecuencia desató una sensación antes desconocida, solo con acercar mi rostro al suyo y descansando los labios delicadamente sobre la tela que cubría su clavícula… Perfume!.

   De arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba sentí un leve hormigueo que recorría todo mi cuerpo, cuyo epicentro se encontraba en el pecho por la forma que empezaba a arder  mostrándose al exterior con un continuo temblor en el pómulo izquierdo de mi rostro.  Todo fue efímero peo intenso excepto el tic del pómulo que una vez instaurado quería ser partícipe de lo que a continuación se desarrollaría…. Premonición! 

   Embriagado por el aroma de su cuerpo y sin obedecer órdenes algunas, mi cabeza se giró por una fuerza magnética atraída por su calidez, buscando con mis labios la piel que recubre su esbelto cuello. Por un momento, el contacto obtuvo como resultado, que mis más ocultos instintos devoradores quisieran, en ese instante, robarle el alma.  El aumento y pesadez de la respiración obedeció de una forma caprichosa a que se desatara un efecto de cataclismo enturbiando los sentidos y por un instante pude dar sentido a un mundo que carece de sentidos…Deseo!

   Su mirada se fijó en la mía cuyos ojos se hacían cada vez mas grandes hasta que justo antes de que nuestros labios se encontraran, se cerraron en un acto reflejo abandonados a una luz que iluminaba aquella oscuridad.

   Lo que se inició con suma ternura desató una lucha entre ambas bocas, con el único fin de intentar dibujar el contorno de cada una. En dilucidar cuán forma resultaría en dicha exploración, parecía como si la vida se hubiere ralentizado sustancialmente. Cuando hube ubicado sus dos picos en forma de corazón que descendían hacia la comisura para  seguir dibujando un arco perfecto de su labio inferior noté como se acariciaban las respiraciones intercambiando perfumes inéditos abocados a dejar la boca tímidamente entreabierta…Pasión!

   Fue entonces cuando los mansos flujos que componían la saliva se enfrentaron,  convirtiéndose en feroces océanos, sobre los cuales se debatían ambas galeras en una épica batalla por abrir y cerrar las diferentes papilas gustativas y saborear las profundidades de su amada en el mismo intento de querer ser atrapada…Lujuria!

   Mientras tanto aquellas manos que torpemente salían de su hastío ahora gozaban de una vitalidad sorprendente cuyos sensibles  movimientos por espalda, hombros y cuello solo anhelaban que el tiempo no transcurriera…Amor!!!