lunes, 24 de abril de 2023

LA OLVIDADA


 

   Todo comenzó con una copa de vino mientras esperaba que llegara la hora de mi cita. La explosión de sabores y olores activó todos mis sentidos, incluso aquellos que un tiempo atrás eché a dormir, por lo que pedí otra copa al camarero.

Había viajado desde Almería hasta las Tierras Altas de la Rioja Alavesa con el único motivo de encontrarme con ella. El reloj colgado en la pared acababa de emitir el sonido que anunciaba las siete de la tarde. La cita era a las nueve y ya me invadía un sentimiento de impaciencia, a pesar de aquel caldo de dioses.

¿Qué tal el vino, señor? ¿Es de su agrado?,- preguntó el camarero que amablemente se pasó por la mesa que tenía reservada junto al ventanal que daba a la calle.

- ¡Excelente! - muchas gracias, respondí. Una cosa por favor, espero a alguien, ¿podría avisar de que estoy esperando aquí?

-Si señor, por supuesto, no se preocupe. - Respondió amablemente,

-Gracias, es importante para mí, … una cosa más ¿Qué vino es? -  Le pregunté mientras sujetaba la copa.

-7 cepas, cosecha propia elaborada con mucho cariño y mucha tradición-.

La noche ya se había apoderado de La Guardia, a través de la ventana se podía ver como empezaba a lloviznar cubriendo las aceras de una humedad que le otorgaba cierto encanto. Dentro, el local se impregnaba de olor a cena, guisos, carnes y brasas. Todo era perfecto. Ya casi estaba el aforo completo.

De pronto, la vi.  Vestía de color oscuro y collar granate que realzaba la figura de su cuello. Debía de ser importante en el lugar, pues el mismo Sumiller la acompañaba sujetándola con el brazo. Varios comensales giraban la cabeza a su paso.

Al llegar a la mesa me levanté para recibirla cordialmente. Diego, el Sumiller hizo las presentaciones y nos sentamos uno frente al otro. No podía dejar de observarla. Su rostro tenía rasgos fenicios y era evidente que su perfume afrutado presentaba matices a frutos rojos perceptibles a esa distancia.

Mientras servían la cena le pregunte por su origen. Tomé un sorbo de vino y con un tono delicado me susurró:

-Nací en Rioseco, una pedanía años atrás olvidada. Mi familia se esforzó en recuperarla. Trabajó muy duro y supo sacarle lo mejor a aquellas tierras arcillosas. El fruto de su esfuerzo más una delicada educación…- perdón no quisiera ser egocéntrica- se disculpó con modestia, pero la verdad que mis hermanas y yo rozamos la excelencia. -

Sus palabras recorrieron todo mi cuerpo y supe en ese momento que, a pesar de su nombre, nunca la olvidaría.

Años más tarde, en mi ciudad natal, tierra también de buen vino, recibí por sorpresa la inesperada visita de mi amigo Valcavada. EL Sol lucía como de costumbre, pues de todos es conocido que el astro rey es aquí donde pasa el invierno.

- ¿Qué tal está mi viejo amigo? - fue su forma de saludarme.

Dejé a un lado el vaso de palo-cortado para recibirlo, como se reciben a los buenos amigos, y le pregunté que le había traído hasta aquí.

- “La Olvidada-” me respondió.

El silencio se podía cortar y luego unir con imperdibles. Pasados unos minutos empezó a contarme:

-          Cómo ya sabes, desde hace unos años desaparece como arte de magia nada más empezar la temporada de recolección. Eso ya viene preocupando a la familia pues nos gustaría que estuviese entre nosotros más tiempo. Pero lo peor de todo, es que la semana pasada hubo un terrible asesinato en una casa respetable de Logroño. Los agentes se llevaron una copa de vino del lugar del crimen para analizarla y aunque no encontraron ni huellas ni restos de ADN, el informe de la científica reveló que en el interior, la copa contenía unas propiedades únicas en el mundo y dada su pureza y combinación de elementos solo podría apuntar hacía un solo ser, ella.

No quise que siguiera hablando del tema, pues ya me había informado en las noticias, así que lo único que se me ocurrió fue:

- ¡Querido amigo! no debes de preocuparte, ya que no hay indicios-. Solté con cierta muesca de ironía para suavizar.

- ¿Cómo qué no?, me reprochó… -ella estaba allí-

-Normal, ¿sabes por qué?

¡No!

-Porque es excelente-